Una persona quiere hacer algo y no puede hacerlo sola. Entonces toma su celular, abre la aplicación de "Idea in a Bottle" y describe lo que tiene en mente, qué tiene ya para lograrlo, y qué necesita de los demás. Presiona el botón "Enviar al Mar", el mensaje se introduce en una botella virtual y es lanzado a un mar digital.
Distintas personas -una a una- van recibiendo la botella: si quien la recibe no puede aportar nada, simplemente la deja pasar, si en cambio puede ayudar con algunas de las cosas solicitadas, toma el mensaje, marca cual es su aporte, y vuelve a arrojarla al mar.
Cuando la idea en la botella consiguió toda la ayuda necesaria para convertirse en realidad, ésta vuelve a quien la arrojó inicialmente, con la lista de personas dispuestas a ayudar. La idea ya puede materializarse