El gigante Weküfe, aplastó y destruyó los patios de recreo de las escuelas. Se presume que el escenario donde los niños y niñas juegan, ríen y conviven con los distintos grupos que integran la sociedad, están convertidos en espacios vacíos, sin ninguna función definida, carentes de significado. Se teme que la consecuencia de su paso genere deterioro y marginación a niños y niñas y su entorno. Tenemos información que el gigante Weküfe pasó por La Araucanía.
Es necesario seguir su huella, observar y medir daños causados y diseñar e implementar patios alegres, coherentes y pertinentes, que respondan a las necesidades particulares de cada comunidad.